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Pensamientos al caer la tarde
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Roselia se llamaba mi abuela materna. En su casita de campo en La Vega tenía de las llamadas brujitas (kalanchoe o calanchoe). Por donde quiera que mirabas te tropezabas con el fulgor de las florecillas color bermellón...
Los viveros en Santo Domingo están repletos de ellas en esta temporada. De las tipo miniaturas y de las más grandes. De estas últimas tengo y de ellas hablaré más adelante.
El techo ya está limpio para el jardín y ya tengo el diseño de cómo lo quiero. La instalación será poco a poco. Para los que les interesa tener un pequeño invernadero en sus casas, o necesitan artículos de jardinerías, les iré hablando de precios y ofertas según lo que encuentre en mis gestiones de compras.
Este fin de semana adquirí un cáctus preñado de hijitos. Corté algunos para reproducirlos y ya les contaré cómo... Ahora me tomaré un cafecito y quemaré aceite con esencia de vainilla, mi aroma...
Hasta mañana.
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